Un proyecto de extensión del Departamento de Histología, coordinado por la profesora Sheila Levy, presenta el vasto mundo de los insectos a niños de 5 a 6 años de edad, estudiantes del Colegio de Aplicación Pedagógica del campus de la Universidade Estadual de Londrina. Desde 2018, el proyecto “Pequeños observadores: los insectos en la visión de niños de Educación Infantil del Centro Educativo Infantil de la Universidade Estadual de Londrina” se dedica a mostrar insectos a los niños, despertando  la curiosidad de los pequeños e introduciéndolos, a través de la observación, al universo de dichos seres.

Los viernes, cada quince días, el grupo coordinado por la profesora Sheila se reúne con 20 niños de Educación Infantil 6 (EI-6) para pasear alrededor de la escuela, realizar lecturas, contar historias y promocionar diversas actividades lúdicas, siempre relacionadas con los insectos. El grupo busca los animales, los observa, a través de dibujos y otras actividades, los niños aprenden de cerca sobre la anatomía de estos seres.

“Es muy divertido, sobre todo para despertar el sentido investigativo de los niños. Al principio, suelen estar bastante aprensivos, pero también curiosos”, afirmó la profesora. Con las primeras actividades, el miedo pasa a dar lugar a la curiosidad: al ver los insectos a través de la lupa, ya no les parece tan aterrador para los niños. “Ellos comienzan a darse cuenta, también con nuestras orientaciones, de que una araña no es un insecto y de que los insectos tienen seis patas en lugar de  ocho como las arañas”, ejemplificó Sheila.

El proyecto cuenta, además de Sheila, con otros profesores colaboradores, todos involucrados en el estudio de los insectos. Del Departamento de Histología participan los profesores Ângela Falleiros y Daniela Pinheiro; del Departamento de Biología General, Silvia Helena Sofia y Renata da Rosa; del Departamento de Biología General y Animal, Carlos Eduardo de Alvarenga Junior y João Antonio Zequi; y del Departamento de Agronomía, Amarildo Pasini.

Los profesores con los estudiantes colaboradores, se alternan en las clases expositivas, las que presentan insectos como el gusano de seda, las hormigas, las mariposas, el mosquito del dengue, entre otros. “El capullo del gusano de seda, por ejemplo, es algo que les encanta ver. Un día, uno de los niños puso una hormiga en un frasco con lechuga para observarla”, comentó la profesora. El proyecto también cuenta con la participación de ocho estudiantes de la carrera de Biología, y asimismo, cuenta con la participación de estudiantes del curso de Agronomía.

Vida de Insecto

La gran mayoría de los niños comienza a perder el miedo a los insectos tan pronto como ocurre el primer contacto, según la profesora Sheila. Con la superación del primer contacto, comienzan a tocar a los animales, una etapa que inspira ciertos cuidados por parte de los orientadores. “Siempre orientamos en el sentido de que una abeja, por ejemplo, es un insecto muy importante para la alimentación humana, pero no podemos tocarlos, así como tampoco podemos tocar a las orugas”, comentó.

La idea del proyecto incluso surgió de la disección de una oruga, uno de los objetos de estudio en los que Sheila ha estado trabajando durante años (la profesora se dedica a la línea de investigación de la Morfología Interna de Insectos). “Estaba disecando una oruga y mi hija pequeña se acercó y se interesó mucho por lo que estaba haciendo. Entonces me di cuenta de que si mi hija pequeña se interesó, muchos otros niños también habrían de interesarse.”

Aparte de cumplir un papel importante de descubrimiento para niños en la primera infancia, el proyecto también es una excelente puerta de entrada para estudiantes universitarios que quieren trabajar con niños. “Los estudiantes de Biología, en particular, se acercan al proyecto ya con la intención de trabajar con niños en el futuro”, evaluó Sheila. A través de la curricularización de la extensión, la actividad se ha vuelto más importante para los estudiantes, quienes ven en esta oportunidad una forma de adquirir experiencia profesional y académica. El proyecto “Pequenos observadores” finaliza en 2023.

Tradução: Bruno Miguel Cardoso Pinheiro. Revisão: Jacicarla Souza da Silva (Programa Paraná Fala Espanhol).

Texto original em português publicado na edição nº1414 do Jornal Notícia: Pequenos observadores, mundo em miniatura