El proyecto de extensión “Diálogos e Educação Ambiental junto aos moradores do fundo de vale da comunidade do Abussafe” (Diálogos y Educación Ambiental con los residentes del fondo del valle de la comunidad de Abussafe – Zona Este de Londrina), coordinado por la profesora Ideni Terezinha Antonello, del Departamento de Geociências (Centro de Ciencias Exactas – CCE), surgió al igual que muchos otros proyectos desarrollados por la Universidad: una respuesta a las necesidades de la comunidad.

Este proyecto corresponde a una demanda presentada en 2021 por el Ministerio Público (MP), destacando la contribución de la Unidad Especializada en Medio Ambiente, preocupada por la formación de un indeseado “vertedero clandestino” en la comunidad de Abussafe, debido a una creciente acumulación de residuos, principalmente domésticos. El Ministerio Público buscó la Pró-Reitoria de Extensão, Cultura e Sociedade (Proex), que invitó a profesores e investigadores para desarrollar acciones en este sitio. Diversos departamentos se manifestaron y, actualmente el proyecto cuenta con la participación de profesores de Geociencias, Arquitectura, Biología, Veterinaria y Ciencias del Deporte.

Los profesores llevaron a cabo diversas reuniones grupales y algunas con representantes del Ministerio Público. Es importante señalar que, una vez formalizado, el proyecto ya se reunió con algunas autoridades, tales como, la “Secretária Municipal de Meio Ambiente” (Sema) y la “Companhia Municipal de Trânsito e Urbanização de Londrina” (CMTU). Para ello, se organizaron reuniones en una escuela local para presentar el proyecto y se realizaron estudios de campo, con el objetivo de aplicar cuestionarios y dialogar con los residentes de Abussafe.

Aunque el “casi vertedero clandestino” ya no existe más, el futuro uso del área no está definido. Una de las propuestas es convertirla en un huerto comunitario, idea que ya se estaba discutiendo desde 2018 pero aún no se ha concretado. Además, se han llevado a cabo diversas acciones, como negociaciones con el Ayuntamiento para la liberación de terrenos cercanos a la ocupación, reuniones con el vicealcalde para evaluar áreas potenciales y para estrechar diálogos con los residentes sobre el uso del huerto.

Diálogos

Uno de los primeros pasos consistió en familiarizarse con el lugar. La profesora Ideni señala que realizaron una visita minuciosa al vecindario, recorriendo calles, casas e incluso adentrándose en el arroyo Água Cafezal, un componente crucial de la zona, casi un personaje. Esto se debe a que el arroyo está relativamente bien conservado, sirviendo como espacio de recreación para los residentes, quienes incluso lo utilizan para bañarse en días más calurosos. Además, el arroyo cuenta con una de las casi 30 cascadas urbanas de Londrina.

A partir de esta interacción con los residentes de Abussafe, la Escuela Municipal Francisco Pereira de Almeida Júnior, cercana al arroyo, se convirtió una gran colaboradora. La profesora y exdirectora Ivete Pimentel señala la extrema importancia de escuchar a la comunidad y conocer a las personas: “El barrio está experimentando un gran crecimiento y con ello surgen problemas de infraestructura y salud”. Aunque los problemas sean los mismos de siempre, ella destaca el potencial local, ya sea para el ocio, el medio ambiente o la economía. Ivete menciona como ejemplo la propuesta del huerto comunitario, no solo para el cultivo de alimentos, sino también de plantas medicinales: “Pero es posible que la comunidad tenga otros interese”, añade. Por esta razón, es esencial que las personas participen en la toma de decisiones. La profesora Ideni complementa afirmando que: “Por eso el proyecto valora el diálogo. Buscamos un intercambio de conocimientos entre diferentes perspectivas”.

La escuela se presenta como uno de los lugares propicios para el diálogo, como destaca el profesor Diego Rodrigo Guilhen, quien también es presidente del Consejo Escolar de la institución. Según él, el barrio está creciendo y, consecuentemente, surgen algunas preocupaciones, como los procesos de degradación. Asimismo, él defiende la riqueza natural del área. Para preservar todo eso, Diego propone que, desde la escuela, se involucre a los padres y a las familias para desarrollar una conciencia ecológica junto con un sentido de comunidad, de pertenencia, y que fomente el cuidado al medio ambiente. El profesor relata que algunas iniciativas aisladas ya han tenido éxito, como una experiencia de plantar girasoles, “Los niños preguntaban todo el tiempo: “¿No vamos a regar allí? o ¿No vamos a ir hoy a ver cómo está?”, cuenta el profesor.

La escuela Francisco de Almeida Júnior, fundada en 1989, cuenta con más de 750 estudiantes, lo que representa una capacidad de movilización significativa en el barrio. Esto es lo que cree la profesora Ivete: “Queremos que los estudiantes estén involucrados, movilizados. Es la escuela la que forma al ciudadano”, señala.

Ocupación

El proyecto también llevó a cabo un trabajo de campo centrado en el área de ocupación en el Jardim Abussafe, donde reside una comunidad de cerca de 15 familias, lo que equivale a casi 50 personas. No hace ni siquiera 10 años que se establecieron y ya constituyen un grupo de personas vulnerables. Debido precisamente a la falta de sentido de pertenencia, al sentirse marginadas, estas personas no suelen procurar al centro de salud local, incluso buscando, a veces, cualquier excusa para evitarlo. Según la profesora Ivete, actualmente ningún niño de la ocupación va a la escuela, aunque algunos ya hayan pasado por ella anteriormente. La investigadora Ideni observa que ninguna de estas familias está registrada en el Centro de Referência de Assistência Social (CRAS), lo que les garantizaría una serie de beneficios sociales.

La situación de estas personas es una de las principales preocupaciones del proyecto, pues estas ocupaciones ponen de manifiesto las contradicciones sociales del entorno urbano y son resultados de una lógica segregacionista que niega a una parte de la población su propio derecho a la ciudad. Esto representa una vulnerabilidad social y ambiental. La participación del curso de Arquitectura y Urbanismo de la UEL incluye un estudio para la regularización de tierras para las familias.

Es importante señalar, como lo indica la profesora Ideni, que la presencia de
este “vertedero” no se debe a las familias que residen allí ya que, debido al
crecimiento del barrio, comenzaron a aparecer otros tipos de residuos, como los
generados por construcciones. Ella afirma que el problema radica en la falta de
políticas públicas y en el escaso apoyo, por ejemplo, a las actividades de reciclaje.
Todos están de acuerdo en que una de las soluciones es la creación de una
asociación u ONG. De esta manera, sería posible acceder a varias políticas
públicas. Sin embargo, la burocracia y la falta de recursos han dificultado la
realización de esta acción, que avanza lentamente con el esfuerzo de líderes como del profesor Diego y la profesora Ivete, quien actúa en el “Conselho de Esportes e
Lazer da Região Leste de Londrina”, el proyecto ya ha realizado asambleas para
discutir esta iniciativa.

La profesora Leia Aparecida Veiga, del Departamento de Geociencias y participante del proyecto, también destaca la importancia de la escuela e informa que, después de la recopilación de datos, los cuales son enviados al Ministerio Público el proyecto regresa a la institución para discutir, identificar demandas y ofrecer talleres a los profesores y la comunidad. Este enfoque representa la perspectiva de educación ambiental del proyecto. “Sin embargo, queremos escuchar de la comunidad lo que es necesario. Nos encanta llegar allí y encontrar personas interesadas”, comenta la profesora Leia. “Y la UEL debe estar presente”, añade Ideni. Cabe destacar que todas las acciones están alineadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible propuestos por las Naciones Unidas (ONU).

Para Ideni, por cierto, otro objetivo del proyecto es considerar la territorialización del área en sus diferentes dimensiones – real, legal, histórica, etc. –e involucrar experiencias educativas desde la escuela y su entorno, creando así vínculos afectivos entre la institución y la comunidad. Se trata de una Educación Ambiental preventiva, con implicaciones prácticas, estrategias y acciones que implican actitudes de conservación y respeto hacia el medio ambiente con el objetivo de mejorar la calidad de vida para todos, según la visión de la coordinadora del proyecto.

Divulgación

Aún hay mucho que hacer, sin embargo, el proyecto ya ha dado frutos. Estudiantes de Iniciación Científica (pregrado) ya han participado en el proyecto y, asimismo, se ha elaborado un Trabajo de Fin de Grado (TFG) basado en él. Una estudiante de Doctorado en Medicina, bajo la tutoría de la profesora Ideni, está desarrollando su tesis en Abussafe. Además, otra tesis en el área de Geografía fue defendida en abril de 2023.

Las profesoras están preparando un artículo para su publicación y también destacan una presentación realizada en 2022 en el GeoSaúde, un evento internacional (lusobrasileño) anual que aborda los desafíos y desigualdades en el ámbito de la salud y de la territorialidad en los países de lengua portuguesa.

El proyecto cuenta con la colaboración de los profesores Léia Veiga, Jeani Moura, Antônio Pires, Cristiano Medri, Morgana da Silva, Thamine Ayoub y Fernanda P. Ferreira; y los estudiantes Regina Franco, Agda Davi, Osmar Filho y Rafaela Estradiote; así como los colaboradores externos Alan Alves Alievi y Caio Cezar Cunha.

Tradução: Bruno Miguel Cardoso Pinheiro. Revisão e supervisão: Jacicarla Souza da Silva. Programa Paraná Fala Espanhol (PFE).

Matéria originalmente publicada em português na edição nº 1421 do Jornal Notícia: Educação pelo diálogo, ação pelo pertencimento.