[ES] ¡Así es, tenemos variaciones!
[ES] ¡Así es, tenemos variaciones!
Matéria originalmente publicada em português na edição nº 1419 do Jornal Notícia. Traduzida pelo Programa Paraná Fala Espanhol (PFE).El idioma portugués no es para los débiles, suelen bromear los memes en las redes sociales de Brasil. De hecho, es una lengua muy rica, y las variaciones, ya sea en distintos momentos, ubicaciones geográficas o contextos sociales diversos, constantemente confirman esta realidad. Para dar un ejemplo: en Río de Janeiro, un niño juega con su “pipa” (cometa). Pero en Río Grande do Sul, “pipa” (cometa) es el enorme barril donde se guarda el vino. Y “barril“, en Bahía, es la cometa de juguete. Las variaciones fonéticas enriquecen el hablar brasileño con melodía, ritmo y fonemas: son los acentos y otros fenómenos lingüísticos.
La principal meta de los investigadores del proyecto Variação Linguística em Sala de Aula (Vale), un grupo de investigación registrado en el Conselho Nacional de Desenvolvimento Científico e Tecnológico (CNPq), es pensar cómo los profesores, especialmente los de lengua portuguesa, deben abordar la variedad del idioma en su práctica docente. Además de las variaciones aportadas por los alumnos mismos, los profesores tienen el desafío de tratar las variaciones encontradas en la literatura, la televisión, internet y otros espacios o medios.
El proyecto se propone analizar el material didáctico existente y desarrollar nuevo material que abarque las diversas formas lingüísticas, tanto orales como escritas. Esto implica combatir los estereotipos que aún están muy arraigados en el país como el “habla caipira“, típica de algunas regiones del interior de Brasil y asociada al ámbito rural o campesino, y los prejuicios relacionados con el “habla nordestina“, un dialecto característico de la región nordeste de Brasil. Se busca, por lo tanto, generar conciencia entre los estudiantes sobre la importancia de la adecuación lingüística en diferentes contextos sociales.
Para la profesora Joyce Elaine de Almeida Baronas, del Departamento de Letras Vernáculas e Clássicas del Centro de Letras y Ciencias Humanas (CLCH) y coordinadora del proyecto Vale, es importante presentar propuestas didácticas más adecuadas a los profesores para evitar enfoques superficiales o estereotipados. Incluso en el aula la realidad puede resultar aún más desafiante: en ocasiones, la variación lingüística es escasa en ciertos materiales didácticos. Según la investigadora, las actividades pueden limitarse a un poema o una tira cómica destinados para una sola clase, sin incluir diccionarios ni fuentes confiables. Es importante recordar la existencia de numerosas fuentes valiosas, como apunta Joyce. El Atlas Lingüístico de Brasil es solo un ejemplo de material científico amplio y disponible.
“Por supuesto que hay libros que ya presentan un enfoque adecuado”, señala la profesora, quien entiende que el material didáctico apropiado incluye contenidos que traten de la variedad lingüística. Lo que ella y el grupo defienden es explorar aún más la riqueza del idioma, manifestada en la riqueza textual de Brasil. Así, hay mucho con lo que trabajar, desde la carta de Pero Vaz de Caminha hasta los correos electrónicos corporativos, y desde las canciones de Lupicínio Rodrigues, reconocido por sus letras sobre el desamor, hasta las de Ultraje a Rigor, un grupo de rock que aborda la crítica social en sus músicas satíricas.
“Vossa mercê en la pharmacia“
Desde hace muchos años, la forma “cê” coexiste con “você” en el habla brasileña, una transformación que no indica en absoluto que todo haya comenzado con un “vossa mercê” (vuestra merced) en Portugal del siglo XIV. Por otro lado, la “ph” del portugués se convirtió en “f” solo en el siglo XX. Como el idioma es dinámico, sigue siendo vivo y está sujeto a cambios en diferentes contextos. En la prensa actual se utiliza, por ejemplo, el término “siglo 20”. Sin embargo, en un periódico del siglo XIX, probablemente estaría escrito de manera diferente. La mesóclise, que no existe en español y se refiere al uso del pronombre átono entre el radical de un verbo y su terminación en los tiempos del futuro do presente y del futuro do pretérito, como en dir-SE-ia, es un ejemplo de variación lingüística cada vez menos utilizada en el portugués. Lo mismo pasa con el pronombre y los verbos de la segunda persona del plural “vós” (vos), prácticamente restringidos a contextos religiosos, como en la Biblia y en las misas. Otro aspecto lingüístico del portugués poco utilizado en Brasil son los verbos en el pretérito mais que perfeito. Así, verbos como “pudera” dan lugar al “pude” (pretérito simple)
Una de las principales preocupaciones de los lingüistas son las etiquetas de “hablar correctamente” o “hablar incorrectamente”. Esto se trata de prejuicio lingüístico. “Nadie habla la norma estándar”, afirma la profesora Joyce. Sería algo artificial. “Todos utilizan la variedad lingüística. Incluso se puede hablar la norma culta, pero con ‘licencias’ permitidas por el contexto”, observa la investigadora. Ella ejemplifica a partir de la propia entrevista: es un diálogo formal, con un tema académico, pero permite pronunciar “diferentchi” (diferente) o “naturau” (natural) considerando también la región geográfica del hablante. Joyce recuerda que en la forma escrita no se permite variación, se trata de error ortográfico. En la oralidad, la diversidad lingüística puede llevar a la estigmatización.
Pedagogía de la variación
La coordinadora del proyecto Vale defiende la llamada Pedagogía de la Variación, en la cual la enseñanza del lenguaje estándar se combina con la perspectiva variacionista que además es inclusiva, identitaria y promueve el sentido de pertenencia social. Sin duda, la norma culta es fundamental, ya que representa una variante de poder y proporciona acceso a entornos como la academia y puestos públicos. Sin embargo, es necesario conocer tanto la norma culta como las demás formas de expresión. “Para ser libre, es necesario saber”, reflexiona Joyce.
Este enfoque encuentra apoyo en políticas educativas. La profesora menciona los Parâmetros Curriculares Nacionais (PCN) de finales de los años de 1990, que generaron cambios en los libros escolares y suscitaron discusiones. Lo mismo se dio con la Base Nacional Comum Curricular (BNCC), implementada en 2017. “Lo ideal sería trabajar con la individualidad de cada alumno. Sin embargo, ha habido cambios, y los profesores están más atentos”, comenta Joyce.
Libro
En abril, los investigadores del proyecto Vale publicaron el libro “Variação linguística na escola” (Variación lingüística en la escuela). La obra es resultado del proyecto coordinado por Joyce y cuenta con la participación de la profesora Stella Maris Bortoni-Ricardo, docente jubilada de la Universidade de Brasília (UnB). Ambas son las organizadoras de los capítulos, en los cuales colaboran otros 11 investigadores. Actualmente, Joyce supervisa a 10 estudiantes de doctorado que están desarrollando tesis sobre la variación lingüística y su aplicación en la enseñanza.
La idea para el futuro próximo es implementar un proyecto de Extensión, ya aprobado, que contribuya para mejorar la formación de los profesores y su desempeño en el aula. Esto se llevará a cabo a través de acciones de educación continua que consideren las particularidades de cada profesor y su alumnado.
Versão em espanhol: Heloisa Vilane Costa. Revisão: Jacicarla Souza da Silva. Programa Paraná Fala Espanhol (PFE).
Matéria originalmente publicada em português, na edição nº1419 do Jornal Notícia: Sim, nós temos variações.